En el interior de cada pieza de bisutería podéis encontrar plantas y flores de Cantabria, secas y bañadas por resina. 

También las tenéis con arena y conchas de las playas cántabras para los amantes del mar y de los paisajes marinos. 

Ya que en cada pieza hay encerrado un trocito de Cantabria hace que sean los souvenirs más perfectos para llevar a familia y amigos.

En el trato personalizado que intento dar a mis clientes está la posibilidad de preservar recuerdos en resina, ya sea el primer diente de un niño, un mechón de pelo, foto, cenizas…etc.  Poneos en contacto conmigo y veremos la forma de hacerlo.